Fuimos canciones
Libro 1 | 536 pág | Contemporáneo | Suma
Macarena vive en Madrid y es asistente de una influencer de moda.
Macarena disfruta la vida a sorbos e intenta ser feliz.
Macarena tiene dos amigas: Adriana y Jimena.
Macarena guarda un secreto que deletrea a escondidas.
Ese secreto tiene tres letras: L-E-O.
Macarena no sabe que Leo está en Madrid.
Macarena teme, Macarena sueña, Macarena ama, Macarena vuela...
Y en este juego del destino intenta aceptar que lo que fuimos no puede ser lo que seremos...
¿O quizás sí?
Porque a veces lo que fuimos da sentido a lo que de verdad somos.
Libros: Fuimos canciones - Seremos recuerdos
Otros libros: Un cuento perfecto
Opinión
¡Holaa! Hoy les traigo la reseña de Fuimos Canciones de Elísabet Benavent, la primera parte de la bilogía Canciones y recuerdos, que llegó este mes a Chile pisando fuerte y con una adaptación próxima a estrenarse en la plataforma de Netflix. Como ya saben, de Elisabet Benavent ya he leído Un cuento perfecto que fue un libro con el que pasé un buen rato y es que con esta autora tengo una fórmula particular: vivir el momento y quedarme por las risas.
"Todos tenemos derecho a enamorarnos de quien no debemos una vez en la vida. Y derecho a aprender de ello en silencio"
En Fuimos canciones conocemos la historia de Maca. Ella trabaja como asistente de una influencer de moda y su vida se resume en el trabajo, las noches con Coque -su ligue- y las juntadas con sus dos mejores amigas, Jimena y Adriana. Es una vida a la que ya está acostumbrada, pero entonces aparece Leo, su ex, en Madrid y todo lo que ha estado guardando y reprimiendo comienza a salir a la superficie.
Leo y Maca se amaron. Se amaron tanto que, incluso cuando no funcionaba, seguían intentándolo. Incluso cuando parecía que el odio era más que el amor, cuando era el único hilo del que podían y siguen tirando. Pero a veces hay que cortar ese hilo y ese puede ser el punto final o el punto de partida para una nueva versión de sí misma, que sea más que los recuerdos, las canciones y los sueños rotos.
Sin embargo, lo que sostiene el libro, lo que hace continuar, enganchar y querer más son las historias de los personajes secundarios.
Aunque la narración de esta es desde la mirada de Maca, vemos cómo se tejen las líneas argumentales de Jimena y Adriana que son mucho más originales y que salen del molde. Definitivamente, son mejor llevada con nudos y luego respuestas que nos dejan pidiendo más.
En ese sentido, creo que si el libro le hubiese dado cabida a las tres historias en igualdad de espacios, hubiese funcionado mucho mejor a nivel de trama.
En cuanto a los personajes de Fuimos canciones, Elisabet Benavent nos trae los justos y necesarios. Cada uno con un objetivo y una posición clara para el desarrollo de la historia. Pero en el caso de los protagonistas, como se podrán hacer una idea, no fue suficiente para mí. Y es que podría haber comprendido mejor la situación entre ellos si aquel detalle lo hubiese conocido antes, ya que sin ese contexto, sus actitudes parecen inmaduras y por eso su historia no terminó de gustarme.
En cambio, los personajes secundarios como Jimena, Adriana, Samuel, entre otros, los sentí más desarrollados y con más capas que ir conociendo. No obstante, sí tengo que destcar algo de Fuimos canciones es la dinámica de la relación de amistad entre Jime, Adri y Maca. Cada una ocupa un lugar o tiene una característica particular que calza con las otras como un rompecabezas, piezas distintas que le dan un sentido único a la amistad entre estas mujeres.
"No hay nada que nos parezca más atrayente que una historia imperfecta porque creemos que podremos arreglarla"
El romance, por otra parte, fue débil. No es que espere una gran profundidad, pero sí algo más allá del sexo y esta idea de que se enamorarán, un poco más de sustento para explicar y entender que haya una segunda parte. En esa línea, me faltó algo a lo que aferrarme, que pudiera shippear y decir "los quiero juntos y me quedaré aquí hasta que pase", aunque lo más cercano fue lo de Jimena y Samuel, pero necesitaba más páginas para llegar a ese punto con ellos.
Ahora, a pesar de todo esto, sí disfruté con Fuimos canciones. Me reí y la pasé bien. La forma de escribir de Elísabet Benavent es tan liviana y con un tono jocoso que todas las situaciones se hacen llevaderas y cotidianas. Aunque en los momentos más emocionales donde se debe ser más serios, me cuesta aclimatarme precisamente por esta característica tan propia de ella.
Fuimos canciones es el inicio de una bilogía cuyo atractivo está en las historias de los personajes secundarios, entregando tramas más originales que van avanzando conforme pasan las páginas. No obstante, a nivel de romance y de premisa principal con Maca y Leo queda al debe, mostrando un círculo vicioso que no termina de entenderse hasta un epílogo que pone la situación en perspectiva un poco tarde.
Valoración
★★★✩✩ (3.5)
¡Muchas gracias a la editorial por el ejemplar!
Con la lectura del libro ya estoy lista para ver la película y comentarles mis impresiones. Tengo que reconocer que, pese a no estar tan segura sobre la necesidad de extender la historia en dos libros, sí tengo muchas ganas de continuar, especialmente la historia de Jimena.
¿Ustedes ya lo leyeron? ¿Se lo anotan?
¡Les leo!
Vale.
