Reseña Asesino de brujas: La bruja blanca - Shelby Mahurin (Asesino de brujas 1)

La bruja blanca

Libro 1 | Shelby Mahurin | 480 pág

Unidos como uno para amarse, para honrarse o para arder.

Dos años atrás, Louise le Blanc huyó de su aquelarre y se refugió en la ciudad de Cesarine, donde renunció a la magia para vivir de lo que pudiera robar. Allí, cazan a brujas como Lou. Les temen. Y las queman. 

Como cazador de la Iglesia, Reid Diggory ha vivido su vida bajo una regla: «No permitirás que ninguna bruja viva». Pero cuando Lou realiza una gran artimaña, tanto ella como Reid se ven obligados a aceptar una situación impensada: el matrimonio. Lou, incapaz de ignorar sus sentimientos que son cada vez más fuertes, pero sin poder cambiar quién es, Lou debe elegir. 

Asesino de brujas: la bruja blanca se desarrolla en un mundo de mujeres empoderadas, magia oscura y donde los romances son fuera de serie. Cuando lo termines de leer, querrás más.

Libros: La bruja blanca - Los hijos del rey - Dioses y monstruos

Opinión

La primera vez que vi este libro en Goodreads tenía la portada negra y su nombre era Serpent and Dove. Me había mimetizado con esa tapa y cuando encontré Asesino de brujas: La bruja blanca, pensé que se trataba de una historia distinta. No fue hasta que vi un live en Instagram que me di cuenta de que se trataba del mismo libro. 

Hace poco, el libro llegó a mis manos y me lo devoré en apenas dos días. Rápido, unos giros increíbles y un final que hace tiempo no me dejaba en ese nivel de shock… ¿se hacen una idea de cuanto me gustó? 

 

Una bruja y un cazador de brujas unidos en un sagrado matrimonio. Solo había un final posible para semejante historia: una hoguera y una cerilla.

La bruja blanca nos aterriza en un mundo donde la magia existe. Lou es una bruja y en la época en la que está, las personas como ella son perseguidas y quemadas por los chasseurs. En este escenario, aparece Reid, el capitán de los cazadores. 

Lou está escapando de su aquelarre, mejor dicho, de alguien de su aquelarre. En su misión por conseguir una ventaja contra su adversario, debe entrar a robar a la casa de un noble que trafica objetos mágicos y tiene un anillo que pueda ayudarla frente a los encantamientos. Sin embargo, las cosas salen mal y Reid junto a sus compañeros la sorprenden a ella y a su amiga, Coco, que también es bruja. 

Lou es considerada como una ladrona y tras un encuentro que los deja en una situación muy comprometedora, ella y Reid se ven obligados a casarse. Reid, para salvar su reputación; Lou, para esconderse entre sus enemigos. 

Antes de hablarles derechamente de mis impresiones sobre la historia en cuanto a la trama y a los personajes, quiero precisar que me gustó mucho la forma en que la autora retrata la magia, porque es una representación -al menos en mi caso- muy “realista”. Practicar la magia en este mundo, implica ofrecer algo para mantener el equilibro, un hecho que debemos tener presente a lo largo de la historia. 

Ahora, con relación a la trama, no les negaré que al principio tuve dudas sobre el libro y me estaba decepcionando un poco. Las primeras páginas no tienen fuerza argumental, pero al menos lograba disfrutar algunos momentos por el humor de ciertas situaciones. Poco a poco, en estos capítulos vamos profundizando más en la forma de ser, tanto de Lou como Reid. Sin embargo, la historia no despega hasta que vemos como la amenaza de este enemigo cada vez se acerca más a la pareja, así como la relación que llega a un punto…. en que mi corazón ya estaba con ellos.

 

Esto último era algo que me intrigaba bastante leer, ya que me preguntaba como harían encajar el matrimonio forzado y la relación tan antagónica que había entre ellos al comienzo. Sin embargo, Shelby lo hizo de una forma que no podría haber sido mejor y que se vuelve el instrumento para explicar parte de la evolución que atraviesan los personajes, lo que nos lleva al siguiente punto.

Cada libro tiene un elemento que destaca sobre otros y que también se vuelve parte de la esencia de la historia que presenta. Sin dudas, ese elemento en Asesino de Brujas son sus personajes. Lou, Reid, Ansel, Coco, incluso Beau -de quien les contaré más adelante- son una fuerza a considerar a medida que avanzamos en la lectura. No son personajes perfectos, sin embargo, la forma en la que van creciendo y que se manifiesta en cada una de sus acciones, nos hace tomarles cariño y ni siquiera nos demos cuenta de ello hasta que sólo queremos verlos bonitos, gorditos y felices. 

Tanto los protagonistas como personajes secundarios comparten esta característica. Dentro de esto, la autora construye a dos protagonistas frescos e interesantes dentro el género. Lou es una chica independiente que no tiene miedo a decir lo que piensa o hacer lo que considera que es mejor para ella; y en la otra vereda está Reid, nuestro cazador favorito que denota una inocencia y nos muestra ese lado romántico que habitualmente no vemos en el género, y que además resulta ser él quien ve trastocado el estilo de vida que lleva a causa de Lou. Dicho eso, quiero hacer una mención especial a Ansel, quien es mi personaje favorito con un arco de desarrollo precioso. Shelby no lo lastimes.

Por lo mismo, las primeras dos partes del libro que, pese a algunos pequeños giros, no manifiesta una trama tan adictiva, pero se leen fácilmente porque queremos más de estos personajes. Hasta que llegamos a la tercera parte. Desde que comienza hasta la página de agradecimiento, la pluma de Shelby nos hace sentir de todo mientras descubrimos y observamos a nuestras chicas y chicos en peligro. Aquí es donde la autora se luce con unos plot twist asombrosos frente a los cuales tuve todas las piezas delante de mi, pero que armé todo mal y que me dejó mal en el buen sentido (?). Mi corazón no podía con toda la tensión que había en esas páginas y finalmente la trama se pone a la altura de los personajes. 

Pero, como ya están acostumbrados, no todo son maravillas en estas reseñas y hablemos de los motivos por los que no le di las cinco estrellas. Como ya les mencioné, el inicio fue algo accidentado para mí y me costó asentarme en la historia, pero gran parte de ello tuvo que ver que nunca logré sentirme parte del reino. La ambientación y el worldbuilding general lo encontré algo débil, aunque de vez en cuando podía imaginar ciertos lugares, me faltó algo que fuera más allá a las referencias francesas y espero ver más del reino en lo que viene.

¿Recuerdan a Beau? Bueno, aquí viene el otro problemilla. La familia real tiene bastante peso, sin embargo, no fue mucho lo que vimos. En su mayoría, obedece a las apariciones del príncipe Beau -sí, es un príncipe, pero no esa clase de príncipe- quién es una persona carismática, coqueta y atractiva de leer; sin embargo, la participación y el rol que juega en las últimas páginas me descolocaron porque no tenía este background detrás que justificara lo que él estaba haciendo que fuera más amplío que que unas menciones que deja caer la autora de vez en cuando, aunque ello no quita todo el potencial que tiene este personaje y que estoy esperando ver en el segundo libro del que ya conocemos su nombre en español: Los hijos del rey.

Asesino de brujas: La bruja blanca es el inicio de una trilogía que combina nuestro mundo con hogueras y los peligros de ser mujer con uno donde la magia es real y las brujas perseguidas. Si bien, conocemos los aspectos más básicos, la atmósfera es algo débil, aunque rápidamente queda relegado ante un romance basado en un enemies-to-lovers que funciona y, que en su relación con otros personajes, nos entrega una historia divertida, amada y con un final que nos deja a todos pidiendo a gritos la segunda parte.

Valoración

★★★★✩

Un fantasy que súper recomiendo y que, personalmente, amé sus personajes y el desarrollo de sus relaciones, así que si ese es su tipo de libro, esta es una gran opción.

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